Los Diarios de Villa Fábula

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Especial: Oculto en las Portadas - Parte II

Ayer nos centramos en las portadas del primer arco argumental. Hoy vamos a dedicar el tema de nuestro especial a la simbología que acompaña a ciertos personajes:

Un ejemplo claro de a lo que nos referimos es Rosa Roja, que habitualmente se ve acompañada siempre por una rosa de una u otra forma. Ya sea como un tatuaje en la cubierta del segundo tomo o en la camiseta que viste en la cubierta del Número 8. Una simbología que además suele acompañarla en los cómics.
Otro ejemplo es la portada del Número 71. Cenicienta se ve acompañada por su inseperable zapatito en los botones del abrigo y además lo acompaña con una calavera en la culata de la pistola, para dejar claro lo que iba a ser su espectacular y brutal miniarco.

Otros personajes no sólo consiguen una simbología propia, sino que verlos en una portadas significa verles inevitablemente acompañados por ella. Por ejemplo, ver a Ricitos de Oro en una portada hace inevitable la aparición de osos en la misma.
Su primera aparición en la portada del Número 8 fue junto a sus tres ositos, pero después de eso la hemos visto en el 14 con ositos en las brgas, en el 16 con otro osito en la motocicleta, e, incluso, en el número 2 de la serie de Jack con coleteros de ositos. A día de hoy es tal vez uno de los personajes más reconocibles en cualquier portada de todo el Universo de Fábulas.
Pero no es la única.

La por la alcaldía de Villa Fábula llevó al Príncipe Azul a crearse un logotipo propio (PC, Prince Charming) que le acompañó desde su creación en el Número 20, pasando por la portada del tomo cuarto, hasta su funeral en el número 79.
Aquella campaña inundó además las portadas de papeletas de voto (portadas del número 20 y el cuarto tomo), chapas (portada del número 30) e incluso de anuncios de subvención:

Pero volviendo a la sombología que acompaña a los personajes.
No toda la simbología ha sido personajes que conociéramos ya en el momento en que dimos con ella.

Por ejemplo a Ichabod Crane la intuímos en gran medida gracia a la estatua del caballero sin cabeza que le acompañaba en la portada del Número 22 y en la del quinto tomo. Pero hasta ese momento nunca lo habíamos visto siquiera.
Aunque es cierto que aquí la simbología era necesaria por el papel que juega la figura en la historia.

A veces la simbología es incluso más sutil en estos personajes aún desconocidos por el lector y que conocemos por primera vez en los números que presentan las portadas.
La primera vez que vimos a Kay en la portada del número 21, lo hicimos viéndole acompañado por una copa adornada con un copo de nieve. La nieve es un símbolo recurrente en las portadas de James Jean para Fábulas, pero sólo aparece cuando están ligadas a tramas relacionadas directamente con el Invierno. ¿Por qué entonces ese personaje de gafas oscuras estaba acompañado por un copo de nieve? Era la forma de ligar a Kay con su cuento de procedencia y marcar así la leve presencia de la Reina de las Nieves.
A veces los símbolos son menos rebuscados y más simples. De forma que resulta más difícil identificar al personaje que acompañan sin haber leído la historia que presentan. Ése es el caso de la H del cinturón de Hansel. Hasta que uno no leía la historia era realmente difícil identificarle.
Curiosamente dicha H le acompañaría también en los cómics, pero esa clase de detalles será tema de otro especial distinto.

2 comentarios:

  1. GRACIAS POR ESTE ARTICULO. ES GRANDE MUY GRANDE.

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  2. Me alegro de que te gustase. Espero que las otras cuatro Partes también te gustasen ;)

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