Los Diarios de Villa Fábula

jueves, 15 de julio de 2010

Fables #96


Si en el número anterior se nos reveló la auténtica versión de Blancanieves y Rosaroja, en este conocemos la verdadera historia de Blancanieves y los siete enanitos, junto con algunos otros detalles que nunca habríamos sospechado.

Para empezar descubrimos que el Príncipe que suponíamos el Príncipe Azul, no lo es en realidad, y su padre, el Rey del Oeste, no está dispuesto a casar a sus dos hijos con dos campesinas, que aún son niñas. Así que para romper el juramento de su hijo acuerda con la madre de Blanca y de Rosa que Blanca ha de morir. Pero la madre de Blanca es una mujer de poder, y su hermana es la Reina del Este, la cual le debe un favor, de esa forma finge la muerte de Blanca y engaña a todos (incluída a Rosa) mientras Blanca parte a vivir con su madrastra adoptiva, y poco a poco va olvidando su antigua vida.
Lo que vino después todos lo conocimos. Blanca creció más y más hermosa, a expensas de la envidia de la reina, su tía y madrastra, la cual encargó su muerte, pero el cazador que había de matarla se apiadó de ella. Eso nos lleva a como se perdió en el bosque hasta dar con los enanos que (como suponíamos desde hace tiempo) la violaron y esclavizaron. Cuando la reina descubrió que aún seguía viva la envenenó y no fue hasta que el Príncipe (esta vez sí) Azul la encontró que pudo despertar, y abrazar su "final de cuento de hadas".
Junto con esto también vemos la juventud de Rosa Roja, marcada primero por la depresión y el dolor, y luego por la furia y el deseo de venganza por todo el engaño.

El número nos descubre algunos detalles muy interesantes. Volvemos a ver un mundo dividido en cuatro Reinos (Norte, Sur, Este y Oeste; aunque el Sur no se menciona lo podemos suponer). Y ahora sabemos el motivo del rencor de Rosa por Blanca, y el porqué ninguna de ellas comprendía los sentimientos de la otra. También sabemos que su madre era una hechicera de cierto poder, y que su tía le debía un gran favor, ya que sin ella el Rey del Este no estaría en el trono. Y que Rosa estaba destinada a un gran destino, pero que la depresión por la muerte de su hermana le impidió cumplirlo.
Y por encima de todo ello tenemos el detalle de que el destino del Príncipe del Oeste y el de Blanca quedaron enlazados de alguna forma, ya que las promesas de los príncipes tienen gran poder. ¿Veremos repercusiones futuras de esta promesa?

Con este número termina un tremendo flashback de dos números completos que ha cortado la trama actual de golpe, pero nos ha puesto en unos antecedentes realmente interesantes para lo que pueda venir ahora.

Ya sólo unos últimos detalles sobre el arte de esta historia. Se nota que Mark Buckingham disfruta de lo lindo con los momentos más fantásticos de la serie, la transformación en pájaro de la madre de Blanca y Rosa es más que digna de mención, y el desfile de personajes que buscan la salvación de mano de Rosa es asombrosa. Los detalles de los diferentes secundarios son tremendos, especialmente de personajes que ya habíamos visto fugazmente (como el padre del Príncipe Azul). Podemos ver incluso como Buckingham recrea viñetas anteriormente dibujadas por otros artistas.
Y sobre todo cabe destacar la expresividad en el cambio de Rosa Roja, de la más profunda depresión, a la sorpresa, y finalmente el hirviente rencor.
Sin duda, éste es probablemente uno de los números más asombrosos a nivel artístico de la serie, y eso es porque el equipo artístico no deja de superarse número a número.

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