Parecía que con una portada como esta nos habíamos quedado sin sorpresas en el interior. Pero por el contrrio las tenemos a cientos.
No es sólo que por fin sepamos qué llevaba Jack detro de su maletín durante todos estos números, al bueno de Humpty Dumpty, sino todo lo que implica a vuelta de éste a la serie.
Al parecer nuestro huevo favorito conoce una forma de llegar a Americana, la tierra original de las fábulas nativas de EE.UU. y sabe de la existencia de un gran tesoro allí (o al menos eso asegura). Pero claro, como toas las historias de Jack no todo va a ser tan fácil. Hay más gente detrás de encontrar esa última puerta a Americana. En concreto la menor de las hermanas Page, Hillary (me encantan sus gafas, quiero unas así), que al fin revela el porqué de llevarse a Paul Bunyan consigo.
Todo este cúmulo de casualidades lleva a la consiguiente espiral de locura, delirio y risas de las historias de Jack: Huevos drogados, bueyes de sexo indefinido, gigantes enanos que vuelven a crecer y fábulas recién llegadas de acento sureño. Tal vez este no sea el número más tronchante de la seie, pero promete mucha acción y entretenimiento de cara a lo que viene en lo que resta de arco.
Como nota adicionl comentar el trabajo de Russ Braun, encargado de dibujar este arco. Me gustan las expresiones de los personajes y sobre todo como resuelve escenas difíciles, como las de la subida al tren. Pero en este número ha sido cuando más he notado lo bien que se ha hecho ya a a serie Tony Akins (de vacaciones en este arco argumental). El dibujo es correcto, pero le falta ese toque de quien ya se ha hecho del todo a unas situaciones y personajes.
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