Los Diarios de Villa Fábula

lunes, 24 de septiembre de 2007

Fables #65


Bueno pues tras el pequeño respiro del mes pasado este número retoma la historia de Papamoscas. Su travesía al fin concluye y consigue retornar a su antiguo reino después de todas las calamidades del viaje a través de la tierra de los muertos (y de todos estos siglos de tristeza y desolación).
Pero es evidente que las cosas no van a ser tan fáciles como llegar y asentarse. Los traidores ya está creciendo como conejos y parece que poco va a duraar el nuevo reinado de Ambrose.
Junto con la conclusión de esta parte del viaje tenemos más detalles interesantes:
- La Página con el cameo de La Reina de las Nieves: Sé que tengo debilidad por ella, lo siento. Pero esta vez es bastante reseñable el ver que ha reunido a los mejores hechiceros del Imperio. Quiere investigar los restos de las bombas del Lobo Feroz. ¿Va a hacer el Imperio la guerra al estilo mundano?
- Frau Totenkinder al fin se descubre. Era de preveer que tenía otros objetivos aparte de los evidentes. ¿Tendrá razón la Bestia y cambiaremos un dictador por otro?
- Parece que al fin se comienza a asentar la relación del Chico de Azul y Rosa Roja. Hasta la despistada de la Bella comienza a darse cuenta de que aquí sucede algo fuera de lo normal.
- Divertidísimo intento el del Príncipe Azul tratando de aprender árabe.
- Me sigue haciendo gracia ver convertido el viaje de Papamoscas en un reality show. Supongo que al menos al resto de las fábulas las da algo de esperanza ante la inminente guerra.
- Los entranamientos de las fábulas de segunda generación en adelante continúan. Y parece que algunos sí que hacen bien sus deberes, aunque luego se vayan de la lengua.
Como pequeño comentario final sobre las tramas. Me alegra pensar que es genial poder pararse a ver la evolución de algunos personajes a lo largo de toda la serie ahora que nos acercamos al final del Décimo Arco (parece mentira ya). Personajes, al principio secundarios como Papasmoscas, que casi parecían estar sólo para hacer gracia se convierten en auténticos dramas humanos capaces de hacernos llorar con sus penas y dolores, y ahora luchan por recuperar todo aquello que perdieron hace siglos. Y otros como Bestia, que en un principio parecían incompetentes calzonazos ahora se descubren poco a poco como eficientes guardianes del orden, con un gran peso sobre sus hombros.
Y parece mentira que después de tanto números aún tengamos sorpresas. Aunque eso sí, los traidores parecen condenados a ser traidores.

Sobre los dibujos qué decir. Mark Buckingham sigue haciendo un trabajo envidiable. Cada rostro está lleno de expresividad y buen hacer. Aunque hay momento sorprendentes como la reunión de los hechiceros del Imperio ¿Es una broma suya o cosa de Bill Willingham esa reunión de especies?
También me encanta como reinterpreta el trabajo de otros artistas. En este arco argumental ya viene incluyendo una revisión de las viñetas de James Jean dentro del cómic. Y la verdad es que sale muy bien parado (y eso que las portadas de James Jean son asombrosas) y dan una sensación de mayor unidad al trabajo conjunto de la serie. Además en este número Frau Totenkinder rememora parte de la historia que ya contó en 1001 Noches de Nevada (que verá la luz en castellano este Diciembre) y su reinterpretación de los dibujos de Tara McPheron es asombrosa.

Bueno ya sólo nos queda 4 números para ver si Ambrose/Papamoscas (cada día más el primero y menos el segundo) reencuentra a su esposa y cumple su misión.

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